¿Qué tal cambiar de rumbo?

¿Qué tal cambiar de rumbo?

A veces nos podemos encontrar repitiendo los mismos procesos, hábitos, caminos, a menudo sin ni cuestionar que hay otras posibilidades.

Cuando salgo a correr hay días que puede parecer algo mecánico, el cuerpo va siguiendo lo que está acostumbrado a hacer, y es fabuloso volver a despertar y reconocer que hay muchos caminos distintos, posibilidades numerosas, opciones sin fin.....

En la vida es lo mismo.

El año pasado decidí tomar otra ruta, un pequeño paso más hacia mayor libertad, seguridad económica y la posibilidad de colaborar con un proyecto ético con una filosofía de vida que me importa, con unas personas maravillosas, crecer personalmente y profesionalmente. Un año más tarde, llena de experiencias y aprendizajes seguimos creciendo juntos en equipo

¡Que agradecida de haber reconocido que hay otros rumbos siempre posibles!