
HATHA VINYASA
La práctica de asana (postura física) de Hatha Yoga se basa en posturas que se inician de forma gradual y meditativa. Se combina el movimiento físico con la respiración consciente. La práctica despierta nuestra conciencia y control del cuerpo, pero además tiene profundos efectos espirituales: nos libera de los miedos, y fomenta la confianza y la serenidad.
Vinyasa se traduce como “poner algo en un lugar específico” y según la tradición de Tiramula Krishnamacharya se refiere a la integración y sincronización del cuerpo, la mente y la respiración en una secuencia metódica.
Profesor senior de Ashtanga Gregor Maehle define vinyasa como:
“Los movimientos secuenciales que conectan las posturas en un “flow” continuo, que crea una meditación dentro del movimiento y nos demuestra como todos las formas son impermanentes y por lo tanto no se mantienen.”
En consecuencia se puede entender el Hatha-Vinyasa Yoga como una serie de posturas (asanas) que se combinan de forma consciente con la respiración para formar una secuencia, y que pueden variar en intensidad y duración según la practicante.